domingo, 5 de enero de 2014

Lamb Of God – As The Palaces Burn [2003]

Lamb Of God es una banda americana de Metalcore de inicio del 2000. Empezó tocando como una banda instrumental, pero con la llegada de su actual y único vocalista “Randy” pasarían a dejar ese aspecto compositivo y se dedicarían a componer música con ahora un Frontman a la cabeza. La banda creció entre ese amasijo de tendencias, nombradas por cierto círculo, de nombre: “New Wave Of American Heavy Metal” ya se podrán imaginar porque surgió esa corriente apelativa entre ciertos “seguidores y críticos” Está de más tanta verborrea, ¿no lo creen?


La ventaja que tienen  estas bandas noveles, ciertamente con una trayectoria entre 10 a 15 años, es que no hay mucha variación entre sus integrantes, ya que la banda cuanta con los miembros fundadores, por lo que tengo entendido. Son: “Duane” en las guitarras lideres junto Willie Adler en las secundarias o de apoyo, Chris Adler en la batería, Randy Blythe en las vocales, y John Campbell en el bajo.  Ya con esto tendríamos el pack para empezar a hablar del álbum.

Vayamos al grano. As The Palaces Burn es un álbum con mucho Groove referente a su sonido, con una implementación de metal extremo: Tharsh y Death. Tiene cavidad con un sonido más accesible y digerible, debido a sus composiciones juguetonas y vacilantes por veces, careciendo de una multitudinaria estructura en sus composiciones y granjeando en un nivel, si bien no técnico, pero si pesadon para la música que vienen tocando. Iremos por partes: me refiero con el punteo y rifeo, y me inclino en esta su parte más thrash, a saber que están rasgando a un estilo muy a lo “Pantera” con esos amplios espacios de tiempo donde el guitarro en vez de crear solos y secciones rítmicas intrincadas, está apelmazando trastes entrecortados en rasgueos(A veces muy confundido con el estilo Djent. Muy distinto, no confundir)

Ya vimos el punto Tharsh, que están enmarcados por sus machaqueos de ritmos, que podrían ser catalogadas como secciones rítmicas “Groovies”, esto quiere decir que los riffs andan más preocupados en crear cortes que desplazamientos y trascendencias continuas en intercaladas secciones (Véase en el rock de antaño o el metal naciente), más bien andamos por un sonido más simple, pero directo, no a la cara, pero si al mentón. Y antes de pasar a otro punto, de alguna manera esto hace que una escucha ligera pueda ser muy placentera y didáctica, debido a su cantidad moderada, diría yo que moderadísima en notas destructivas.

¿Donde vamos? a su faceta más endiablada, esa careta extrema con seño fruncido: su Alter Ego, “Death Metal” si bien su sonido no es puramente un “Death” tradicional o moderno, pero no obstante, su vocalista emite ciertos guturales, semi más bien, que pueden entrar en una categoría más pesada a la del Thrash; aunque, mis amigos, muchos hemos comprobado que a veces eso no es del todo cierto, tenemos gente Thrasher que nos hacen de inmediato rascarnos la cabeza y pensar: Puta, no sé que carajos tiene de Thrash esto (Véase en Morbid Saint o Protector, por dar sólo algunos ejemplos)

 Ahora bien, su lado “Groovie”, como muchos sabrán, bandas de esta tendencia surgieron con el objetivo de totalizar un sonido extremo, esa pesadez innata y llevarla a niveles más “disfrutables” que mostrasen una lado más “sabroso” y con una carga rítmica palpable. Para los señores estas expectativas son intachables, las cumplen con dieces tallados a plata fina, pero, por la misma naturaleza del los Grooves, a veces tenemos cierto saturamiento, pudiendo ocasionar un colapso monótono, y en el peor de los casos podría causar aburrimiento, muermo o tedio. A mi en lo particular ese sonido no me molesta, pero no soy un ferviente adepto de él, mucho menos causando proselitismo y propaganda para la banda.

¿La batuca y el bajo? La primera no está mal, la segunda tampoco, pero “X” factor común, promedio o cualquier adjetivización neutra que pueda moldearse a su imagen y sonido. No es para nada destacable, pero así tiene que ser para el sonido que tratan de presentarnos. Caso muy distinto fuera una hipertécnica en ambos falanges, y creo yo no estar en el error de decir, si así fuese su sonido tendría que trascender intrínsecamente; esto por los valores compositivos cargados de empuje y tendencia a innovación, no se podrían estancar ningún instrumentos.

La producción por se nueva está de lujo. ¿Qué se pueden esperar 2003? Aunque siempre he creído que las producciones no son cosa de azar, en algún disco o banda se acopla y en otros simplemente se embadurna de lodo, fiasco y deshonradas miradas de reclamo hacía la impalpable cordura, el derroche de talento y la abnegada constancia. ¿El Arte? No me llama la atención, ese entrelazado cromático disoluto…. Mmmm, paso.

En fin. Hay canciones violentas, duras, con una dosis cargada de frescura y aires renovadores, aunque no es música tan relevante para mí. Para tomarse un refresco, hablar de las cotidianidades de la vida, tener una platica entretenida entre amigos… pero nada más. Si lo hallan y no lo han escuchado, tienen el sello de aprobación y no hay pierdes ni música faltante de algo. Sólo tómalo, nene





Nota: un tambaleante 7.4 y si me pongo de malas te mando a comprar donas, ¿entendido?



Publicado Por: Albert Spaggiari

2 comentarios:

  1. me lo descargare ah ver si es tan bueno como dices ;) (y)

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    1. No es un disco "imperdonable para todos" pero te aseguro que si te gusta el metalcore con una tendencia muy groovie y violenta es muy difícil que te decepcionen. Eso sí son más pesadones que los Bullet For My Valentine, con eso ya tenes una antesala de lo que viene.

      Primer comentario del blog :D Saludines, Eduardosequeira238

      -Albert Spaggiari-

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