miércoles, 24 de septiembre de 2014

Spike Jonze – Her [2013]



Cuando todo lo que haz visto actualmente ha sido “Los Vengadores”, sabes que estas en un error si piensas que todo ese alucine a lo Hombre Araña con efectos más irreales que el sueño de un psicópata, es el cine de esta apestosa era. Para salir de la tónica, ya sea en ficción chatarrera, bodrios para cascarse un billón o simplemente arrogancia, tengo en alto el acontecimiento de una cinta que es innegociable por el sentido del cual ha explotado en boca de labiudos y gente apasionada, donde se descubre la genialidad de una idea. “Her”, o como se traduce: “Ella”, es el devenir de películas como “Media Noche en Paris”, “El Artista”, entre otras. Son el ejemplo más sencillo de una autenticidad única que han forjado, mediante los recursos avanzados. Por ende, acerca tantos moscarrones hasta mosquitos, pero sin atraer la vulgaridad taquillera.

Estamos tan acostumbrados a tragar clavos, que nos vemos obligado en la ridícula situación de sumergirnos en “años gloriosos” o el pure-alien-gore-surrealist-underground-blablabla… Y sin irnos tan lejos: Spike Jonze, un completo desconocido con apenas un repertorio no tan caducado, me ha expuesto en “Her”, el equivalente a Romance de verdad y no estupideces, a calidad enfrente de tus narices. La historia trata en un futuro cercano de Theodore Twombly (Joaquin Phoenix), un hombre sentimentalmente complejo donde trabaja haciendo cartas conmovedoras a la gente. Dentro de una larga relación finalizada con su ex-esposa, ha encontrado mediante un sistema operativo inteligente una relación, el sistema con voz femenina llamada Samantha, logran una relación amistosa que crece mediante experiencias y sentimientos hasta transformarse finalmente en una relación de amor.

A medida que corre el tiempo, nos sometemos a un estudio crítico sobre los sentimientos producidos por nuestro protagonista hacia Samantha, sus problemas, las circunstancias que sufren a largo plazo, la aceptación. En fin, El amor en los tiempos de la inteligencia artificial. Y como si no fuera poco esto, no se acometen estupideces, muertes o algo parecido para surgir cambios en el ritmo desencadenado del film. Nada, ni mariconadas a lo FB, ni personajes jóvenes. No, no estamos ante un Clon de “Crepúsculo”, como tampoco un romance juvenil del asco como “Bajo la misma estrella”. Pero sí en una unión sobre la Ciencia Ficción y el Romance, dos géneros que para exponerlos, no debemos caer en gracia de circo.

En “Her” todo está elaborado mediante una función excesivamente creativa para lograr que 2 simples horas, te arrastren a un entretenido y melancólico ambiente que quisieras que durará 10 días (Tiempos que llevo al no sentir eso con una película). ¿A que carajo me refiero?, A lo más premiado y el mérito absoluto que hace de esta cinta una evolución del tópico romántico o el telenovelón de siempre: Su guión, Su dialogo. Así de sencillo, transcurre dentro de una amalgama colorida de temas personales dentro de la pareja, como también surgen preguntas y confusiones, que hacen enriquecer más la experiencia real de los sentimientos de una persona. Y eso, no es lo mismo que aplastar una cucaracha con un zapato. La cercanía a la humanidad o solamente ver el lado abundante femenino de Theodore, te deja claro las cosas.

Un aspecto formidable y sólido, es la actuación. Una cosa es el complemento perfecto, y otra es crear un personaje. Cosa muy distinta, la cual Phoenix hace el segundo factor sin ninguna molestia. Es sorprendentemente que todos los ángulos antes dichos con éste, se vuelvan en un mundo que atrae al espectador sin ningún aburrimiento. Su formula radica en transmitir la mayor carga de amor, a través de la mirada de Jonze. Ya, ya no hace falta decir nada si ni siquiera nos aproximamos al verdadero aguacate que se nos lanzó hace poco tiempo, y que no lo vimos por estar tan ocupados en el “Hobbit” o en los desagües.

“Ella”, no es ni con el dedo más largo, un opus magnum. Pero si algo tiene, es una mirada diferente hacia el amor, el afecto que se le puede dar a cosas o a alguien, aportando esa temática y rejuveneciéndola con la tecnología con la que vivimos. Dentro de caracteres totalmente fuera del ordinario cuentito de los jóvenes que se aman, sin importar el que. Y no todo se trata de amor sin barreras, porque si lo creemos así, ya deberíamos colarnos por conseguir ésta, en DVD, para ensayarnos la realidad del asunto. "Her", es en pocas palabras: Lo Mejor que he visto en el 2013, y tal vez mucho más...

Cerrando, dejo dos frases: “A veces pienso que he sentido todo lo que voy a sentir”, “Si te hace sentir, es real”.



Nota: 8.5, y todavía no lo me creo...


Publicado Por: Zdzislaw Beksinski


domingo, 21 de septiembre de 2014

John Frankenheimer – Seconds [1966]



Y del costal uno salió, luego una decena hambrienta, y por ultimo una masa incontable que querían ganarse un lugar. Si hablamos de cine, por obligación los años 60s deben de hacerse mención, pero cuando nos toca la labor de hurgar más allá de la fangosa cubierta de lodo, nos podemos topar un descubrimiento del bueno. Está vez hay que remarcar aquellas cintas empolvadas de su era, que a lo mejor solo un castor pudiera haber masticado. Todo el ruido que pasaba por Europa, los Gringos y Compañía quisieron copiarlo, transformarlo o incluso mejorarlo. Hoy, se nos viene encima un ejemplillo adelantado a su época y con innovación de sobra.

Dentro de los patrones absurdos de ciencia ficción, no veremos ni pio. Dos Razones: 1. Me aburre hasta el cansancio esa mierda, y 2. Solo ver el titulo de entrada te dice que esto no va del travestismo cósmico de siempre. No, a callar los gecos y a destriparnos una frígida historia que exprime preguntas al aire y una dosis de emotividad. John Frankenheimer al mando, nos emplea dentro de su apogeo sesentero un clásiquillo imperdible: “Seconds” o como se podría llamar por estas lenguas: “Plan Diabólico”, publicado en 1966: Una trama con un mensaje profundo, donde los ángulos ficticios, surrealistas y psicológicos entran en acción añadidos como mantequilla al pan: Arthur Hamilton, un hombre cincuentón que vive del sueño americano, con una aspiración en dirección general de un banco, casado pero sin nada de cariño, padre de una hija que se ubica al otro lado del mundo…En fin, la típica vida aburrida que aparentemente es un trofeo para los inútiles, mientras el film desproporciona inmediatamente la critica a esa meta que se les pasa a algunos por la cabeza.

Prosiguiendo: Cuando Arthur toma el tren, llega un hombre y le da una dirección. Luego se ve ya en su residencia, donde lo llama un amigo, que aparentemente estaba muerto. Pues éste ultimo, intenta convencer a Hamilton de ir a la dirección desconocida. Al llegar, tenía que decir que se llamaba Wilson. En todo ese transcurso, finalmente lo llevan al sitio original en un camión. Finalmente al entrar al edificio extraño y silencioso, le ofrecen una oferta de renacer, de que finjirán su muerte para realizar sus sueños, todo bajo un contrato de la empresa, a conveniencia. Finalmente tomada la decisión, se le ejecuta una cirugía para cambiar su aspecto físico y darle un lugar como un pintor soltero en una casa en la playa.

Y como todo lo que sube, tiene que bajar, los ideales y pensamientos por convertirse en Tony Wilson lo inquietan. Al conocer a una mujer llamada Nora, aparentemente la solución de Arthur/Wilson aparecería con el Amor. Pero no es hasta una noche de invitados donde el protagonista en estado de embriaguez da señas de su pasado, siendo ese comportamiento un peligro para la empresa, como también se le presenta al renacido la realidad de su nueva vida. ¿La transición y el fin? Ufff… Ni que decir!, se los dejo en la mesa y espero no se mosquee.

OBRA DE CULTO, no hay que pedir mucho…Se expresa mucho pesimismo, la consistencia del rodaje con muchas analogías sobre la libertad, la felicidad. Y de paso se nos pone de frente una trama ingeniosa que no afloja el cinturón. Los sucesos existenciales que ocurren con las personas uniendo un hilo con la ficción de poder crear un método para renacer. El costo de nacer nuevamente. Aborda muchos puntos críticos de la existencia, cargando las escenas con memorables tomas. La visión del fin del sueño americano, las empresas, los doctores. La tenemos difícil si queremos explicar sin experimentar….

Algo tan irremplazable como una idea o un relato, eso nadie te lo quita. Pero el hecho de expresarlo, puede que seas tú o cualquiera el que lo haga mejor. Frankenheimer no necesita una recaudación que nunca tuvo, solo un equipo técnico lo suficientemente competente para el desarrollo de “Seconds”. Rock Hudson: Se nota el cambio drástico de personalidad dentro de Hamilton, al momento donde rejuvenece. El acto de que tu mente sigue siendo la misma, pero tu físico ha sido otro parece ser otro de esos simbolismos que están impregnados en la cinta. Lo más destacable es la función de blanco y negro de James Wong Howe, que bien le valió un premillo. Y el énfasis de conversión que pone en entretenimiento al espectador.

Como si no fuera poco, te mete en el aura psicológica, con dosis de horror, de suspenso. Los personajes produciendo un sentimiento inacabado. No nos quiere dar falsas esperanzas, apartando el fondo de crítica social al sistema, te embargas a direcciones paralelas de sentimientos bajo el cuerpo de Arthur/Wilson. Está vez no divagaré, y les dejo una película imprescindible, adelantada, arriesgada y sobretodo: Buena. ¿Qué más se puede decir si tienes frente a ti, una película que tanto en historia como desarrollo excelsos, son adheridos bajo una visión inmejorable en técnica y complejidad? Pufff.. De estas son las que uno pide, luego vienen con una payasada de pintarse de verde la verga y ya es ciencia ficción..Buff… Terror, Drama, Sci-Fi, Patatas, Documental, Erótico. Absolutamente todo te puede importar un quinteto de caca, cuando la propuesta que te exponen es igual a calidad pura: “Seconds” [1966]

 “…Elegir la muerte, puede ser la decisión más importante de su vida”




Nota: 8.5 y la weba de escribir sigue...


Publicado Por: Zdzislaw Beksinski


viernes, 19 de septiembre de 2014

Richard Fleischer – Cuando el destino nos alcance (A.K.A Soylent Green) [1973]



 
Volvemos al cine de ciencia ficción, y esta vez no es meno que presentar una de esa películas un poco rezagadas, que con el paso del tiempo han ido acumulando una buena masa de polvo, y tanto que también han prevalecido como una notable influencia para los incautos advenedizos. Eso sí, un poco de husmo si que trae la película en cuestión para aquellos infernales que esperan siempre las hiperproducciones. Que les quede a todos claro que seguimos hablando del 70’s, y la menor alebresto, pal rio. Soylent Green también es una producción rescatable; tiene lo suyo. 

Ahora bien. Todo empieza con una trama coloreada en un mundo distópico en el año 2022. Donde la población ha crecido a 40 millones solamente en la ciudad de Nueva York y para subsistir tienen que consumir una especie de alimentos sintéticos: Soylent Amarillo, Soylent Rojo. Estos nuevos alimentos están controlados por una poderosa y clandestina industria que proporciona la dosis necesaria a los damnificados. El policía Robert Thron, (Charlton Heston) sospecha; después de la muerte de un accionista mayoritario como importante en las industrias de Soylent Green. Este policiaco se verá envuelto en una serie de sospechas para con los empleados y servidumbre de Simonson, el hombre que fue asesinado en su mansión.
Descubrirá que el Soylent Green es fabricado con personas muertas. Al final de la película no hay solución o un recurso esperanzador para solucionar este problema global. 

El filme, si bien no decae, si se torna predecible; aunque la idea de alimentación suministrada bajo controles subrepticios por medio del gobierno, es una clara negativa contra la natalidad y sobrepoblación llevada con un concepto fino a la pantalla. Como bien lo dije en la reseña de ‘Silent Running’ este tipo de producciones, muy esforzadas, eso que quede claro, son guidas por un maquinismo común en toda su idea motriz.

Vamos a ver, quiero decir que, aunque la protagonización esté muy buen ejecutada, los planos y la realización son muy arcaicos, inmejorables sí, pero arcaizantes. Es más, a mi me parece que el mensaje es el más rescatable de este tipo de películas, y no tanto porque sean ideas muy genuinas y alentadoras o que te hagan meditar mucho, más bien, son esa clase de películas comerciales (De hace  40 añetes) que proponían inventiva conceptual, pero descuidaban mucho su entramado, su realización; la proyección de cámaras, los efectos con que empezaban desvirtuarse… todo y más hacían las cintas más deplorables y caliginosas.
Y es cierto: ponerse a reflexionar, como si la cosa fuera un test filosófico; ¿Qué haríamos en una situación así? En eso no falla este tipo de ciencia ficción. Aunque vuelvo a tocra el mismo punto, de qué sirve una trama bien ambientada y organizadora, si tenemos siempre el mismo desarrollo técnico… y es que eso hace a este tipo de películas desfallecer por momentos.

La ambientación y recursos, como lo mencioné, esta muy genuina y delicadamente realizada. Cuando vemos, en ese cuadro desesperanzador, como las personas formar columnas para  llenar sus garrafas de agua. También, por otra parte, como el Anciano sol, amigo del oficial, pasa en tiernas tertulias recordando cuando el planeta tierra era habitable, y la desforestación, la escasa fauna y flora eran problemáticas tratables, que aún no se salían de las manos de la conciencia humana. Puesto que ahora todo es pérfido, desleal, indigno e infame, el mundo de ese 2022 ocupa una vista cual bola de arena seca, así como si todo fuese un desierto, y los pocos recursos naturales fueran para los privilegiados… en este caso, el valor moneda aún predomina, y todo se canjea por dinero, cosa que sólo altos accionistas o responsables de pudrir a la población con la parte restante, la población muerta, pueden acceder. 

El cuadro más relajante y vivificador es cuando el vetusto Sol se hospeda en ‘El Hogar’,  centro de mortandad para los octogenarios, septuagenarios.. o simplemente todos aquellos adultos mayores que desean acabar su vida. En esa cámara tranquilizadora, se muestran imágenes de  como era el planeta tierra antes (Así como lo es hoy) el par de amigos con lágrimas en los ojos, sollozan la belleza (Por parte del polizonte) y la remembranza y añoranza (Por parte del veterano)

Ahí me gusta el archivo que se maneja. Pero, bueno. La cinta tiene sus partes de pináculos, y sus otros destientos, cosa que no son muy agradables. A más de alguno le fascinara la propuesta que presentan en términos del guión, pero a mí ya no me sorprenden muy febrilmente, cuando siguen siendo indistintas ante el ojo cansado. 



Nota: 6.1 y nos vamos pa la carreta con la cartera en la carreta.


Publicado Por: Albert Spaggiari.  

martes, 16 de septiembre de 2014

James Cameron – The Terminator [1984]



Ficción en Acción!, para impresionar a la cotorra y exprimir un buen rato. Y que mejor elección que con un clásico de una era clásica, como lo fue los 80s: The Terminator. La crema de la acción, entretenimiento, explosión, pistolazos y persecución dentro de una licuadora ficticia de un cyborg exterminador del año 2029, donde es enviado al pasado para evitar la rebelión con los humanos en su era, tratando de buscar la madre de John Connor (el líder de la rebelión), para asesinarla e impedir que éste nazca.

Peliculón de los clásicos de acción, de esos que no te los tomas tan a pecho al menos que ya en sí, la trama y la elaboración sea de un parvulario. Porque si algo tuvo esta cinta fue: Esencia. Y como lo he dicho antes: Todos los debuts mantiene esa frescura de imaginación, que luego se aprovechará como reciclaje de condones con un mal invento y una venta segura para los mosquitos. Y ya todos conocemos este rodaje de James Cameron, antes de que éste se volviera más marica de lo que es…Hablar de Shermaneitor como un mensaje de la tecnología dominando la raza humana, es como hablar de patatas mientras viajas en un globo aerostático. Simplemente no cuadra, habiendo más cosas que hablar, habiendo más películas que se centran más en ese tema. Pufff…Acción Papá! Para eso estamos.

El ingrediente extra es un Schwarzenegger como una bestia bruta, en lo que a mi respecta, su único papel decente. Y para no poner la típica figura musculosa o un tipo guapo que salva el mundo, y que no recibe ningún daño. Tenemos a un puto organismo cibernético que no piensa ni un segundo en hacerte caca de puerco, que tiene un blindaje poderoso, inteligencia suficiente para encontrar a alguien y una personalidad excelentemente interpretada por un cavernícola fortachón con cabeza de Bart y una voz más cuadrada que un militar. Nada de patrañas absurdas de “Rambo” o un chiste mal hecho como “Robocop”. El exterminador, con un nombre espeluznante, con un papelazo adecuado, con un esqueleto robótico de ojos rojos, ha forjado una inolvidable figura en el mercadillo.

Y el bueno del film, sería un soldado humano de la legión del 2029, que viaja al pasado detrás del Exterminador, para salvar a Sarah Connor y destruir al antagonista. Los tres protagonistas se embargan en una persecución, donde en ella hay tiempo para explicar los sucesos en algunas escenas, pero lo que pesa menos es el hecho incontestable de que ni a un bajado del monte le podría aburrir un minuto de esta patata. Porque esto esta hecho pa cualquiera y pa disfrutar de un clásico que pasa por aguas y no envejece. Con respecto a los efectos especiales, no bajan del listón, con toda su sangre falsa, la estructura robótica de Arnold, que es lo más sobresaliente..Buff..No sé que hago aquí escribiendo esto, mientras el que me lee, necesita ya tener este artefacto en su videoteca, junto a su colección de Chuck Norris o en un nivel más alto… Eso sí, dentro de la franquicia, esto no tiene comparación, excepto por una que otra secuela bien hecha.

Lo más apetitoso: el entretenimiento 110% que proporciona, los tres papelazos de Schwarzenegger, Michael Biehn y Linda Hamilton que son únicos en la saga, los efectos decentes para la época que era, y su trama.

No vengo a aportar ni un pepino rancio sobre la película, y mi propósito en esta ocasión, es llenar el vacío rotundo del blog con bananas para los monos: “The Terminator”. Aprovechar el festín, y ver si te toca un buen filete o un rábano tibio.



Nota: Un 5.0 más alto que el Everest y con la weba de escribir como un caracol


 Publicado Por: Zdzislaw Beksinski

domingo, 14 de septiembre de 2014

Douglas Trumbull – Naves Misteriosas (A.K.A Silent Running) [1972]





Empezaba a explotarse más de lleno el cine de Ciencia ficción, y tenía que hacerse valer como cine de ciencia ficción, no tanto como revistas de los 50’s que aún dejaban ideas utópicas, mera y únicamente como eso: Ciencia ficción, “cosas que nunca pasan, que nunca suceden, y no pasaran” de ello hemos aprendido algo al terminar de ver Silent Running: decantador y clásico film que revitaliza la maraña de Sci-Fi; y es que el ser puede cuidar su hogar, su planeta, sin que una película setentera, algo mofletuda, nos venga a concienciar a tal grado.  Porque el cine es eso: una maquinaria encendida de ideas, ideales, ideología. Hay de aquel palurdo que reniegue la ciencia ficción con teoremas infausto como: “Es que no es real” “es por lo menos Thor es cultura llevada al cine” “es que lo viejito me produce urticaria en mi vena de marica solapado” 

Porque una cosa es bien sabida cuando termines de ver la película que hoy atañe, y es que, puede llegar a molestarte el cáliz ecológico que ésta recoge con desmedido recato para usarse como temática central, o que te dejes de miríadas y recompensa hacía el metraje que compete. Porque en realidad, de misterio no tiene ni gramos; y de naves explosivas, mucho menos. Duro o cruel destino en el que los he causado: Es una pelí hippie de la importancia ambiental, o sólo una cutre y postiza auto elevación de lo viejo por lo nuevo… Jajaja,¡ las dos! Eso sí, reto a cualquiera a que venga a desmentirme por qué esta película no tiene anzuelo aquí, por el simple y vacuo hecho, de que es MUY VIEJA, que no tiene LA PRODUCCIÓN requerida, o que, en el caso que me haría  rabiar espuma verde, que no hay estallidos, no centellea CIENCIA FICCIÓN. Pues en ese caso aquél que llegue a pronunciar esas palabras, que me lo haga saber… porque así sólo quedará como un completo DESINFORMADO, por no decir imbécil. 

Nos centramos en el Siglo XXI. La tierra está pasando por un momento crítico, ya que los recursos naturales, su flora, ha sido malgastada, y ya no hay forma para volver a regenerarla si no es suplantándola por una simiente y nueva vegetación. Dicha vegetación tiene lugar en Valley Force, por los anillos de Saturno, donde yacen en varias cúpulas, que son cuidadosamente protegidas por un cuarteto de internautas a cargo del botánico Lowell, que ha guiado la misión durante 8 años. El sueño de éste se trunca cuando el gobierno informa  abortar la misión, adjudicando que la vida en la tierra puede ser sustentable: trabajo, dinero, y negocios… “qué cosa más maravillosa, ¿no?” la verga. Antes que nada tienen que hacer explotar las cúpulas donde guarnece una dotación de bosques lozanos. 

Los tripulantes, excepto Lowell, rebosan de felicidad por regresar a sus hogares, pero el botánico se siente frustrado por la inminente desaparición de los bosques; e intenta proteger a sus “bosques” matando a sus compañeros, así regentando el control de Valley Force. Aquí se desmaña una riqueza en fotografía inaudita, un orbe de sentimientos de culpabilidad, un rechazo hacia la integración popular, una amarga carga que lleva el botánico Lowell ha protegerse de los insensatos.  El puente que se construye mediante ideologías opuestas, es increíble. Los diálogos entre la ética ecológica y la moral capitalista, son gran parte de la soberanía que la cinta ofrenda a sus espectadores. Y eso, eso se agradece.
  
Unos Robots que serán reprogramados por el único tripulante, para que éstos llenen el vacio y la culpabilidad sobre la muerte vertiginosa de sus anteriores compañeros. La nota musical, guiada por Joan Baez, es tremendísima  y casi responsable de la empatía que llega a producirme el filme. Más allá del concepto, los planos se mantienen en regla, éstos sugerentes y no se alejan de las teorías atípicas de Europa. Los carritos miniaturas, la plantación, el humanismo, la ayuda autómata remplazada por la conciencia humana es algo de reverenciar; cómo un filme puede traernos con tan simples  y convencionales estrategias de conservacionismo, una propuesta dentro del género, una propuesta que se va descociendo en su fuerza central: La mejora de la vida humana. 

Es gracioso ver que el ritmo de la película es adecuada: propone distanciarse mucho de la típica colonización de planetas, de la regurgitada e inmisericorde temática de vida alienígena, del imperio de Robots para con los individuos. Vaya, Vaya. A mí eso es lo que me gusta: la propuesta.  Es cierto, toda cinta lleva su advertencia entrelíneas, y es que si no te va el rollo de plano recatados, y eres, con el permiso de la progenie de nuestros primos, un simio con sed de sangre y autosvoladores en primerísimos planos; la película no encajara en absoluto contigo, y en verdad, sólo sin en verdad, estás buscando propuesta, pues aquí ya tiene garantía, o como dirían los vendedores de dulces: “GARANTILLAS pa’ toel género”

No aunaré en la trama, porque a mí también me jode que me la arruinen sin haberla visto: aunque ya pronuncié un hecho hará enardecer a los ignaros. Pero la cosa es verla, vah, bichosos?
Lo demás es canela fina y candela dura. Digna de ser vista, y de aprovecharse en su totalidad.  Los que dejan pasar la propuesta por la zona de confort, mejor sigan estallándose las cabezotas con la última de Transformers… que eso si les va a la medida. 

Los que buscan encontrarán, y sé que encontrará a Silent Running. ¡Sin paliativos. A disfrutar! 


Nota: Un 7.8 muy justo.



Publicado Por: Albert Spaggiari.

 

viernes, 12 de septiembre de 2014

Jiri Trnka – Kyberneticka Babicka (La Abuela Cibernética) [1962]



República Checa, a lo largo de su historia me ha demostrado tanto en este sitio como afuera -sin profundizar casi ni un pelajo en su tierra-, que es una pieza clave en el arte. Hoy no es la excepción, este país da de que hablar dentro de distintas épocas y dentro de distintas ramas. Espero nunca se acaben las sorpresas en el futuro, porque las ofertas de las tierras idílicas y frías de la antigua Checoslovaquia, me han traído un espécimen de alta categoría que no quería pasar por alto. Mucho menos, sabiendo que estamos hablando de un tipejo llamado Jiri Trnka. Nombre tan común como poner letras al revés, pero su cargo dentro del cine es todo lo contrario. Chicuelo si nunca haz visto este nombre (hasta ahora), es porque tanto como tú y yo, sabemos que esto no es pan con mermelada o el periódico de la mañana, esto no es rutina Hollywoodense.

Encomendarse a la pantalla radiante no es un oficio de mal gusto si bien vale la pena, pero mosquearse el hocico con total aburrimiento sin nada que hacer es una estupidez rotunda. Hoy por hoy, me he decidido tras ver un artilugio totalmente desapercibido en el mercado, el hacerme la faena de desglosarlo con el ánimo de un leopardo. Como apunte anteriormente, todos debemos de conocer a Trnka, al menos de toda la sopa no cae mal un sorbo del bueno. “Kybernetica Babicka”, es un expediente que revela un director que fomentó el “estilo checo” tras forrarse en su catalogo, alrededor de 20 cintas, de las cuales 6 son largometrajes. No hace falta decir que ni yo sabía de su existencia hasta estos días, pero al ver su influencia y su estilo, mínimo debemos de buscarnos un rastreador de películas y ver una, al menos.

La trama de “La Abuela Cibernética” comienza cuando los únicos personajes, como lo es la abuela y su nieta, reciben un mensaje cuando están en casa, donde éste mensaje es una foto que envía un brazo robótico volador, anunciando la hora de que la Abuela le presente a la niña el lugar que seguramente en un futuro tendrá que vivir o experimentar, cuando su querida abuela muera. La pequeña niña no menos de 6 años, va con la intención de visitar el lugar con su familiar, tal vez pensando que es un lugar turístico o algo parecido. Una vez que la anciana inserta en la programación de una computadora el nombre de ACH028, como el hogar y nombre de la niña en el reconocimiento de la máquina (por obvias razones, su nombre no se llama así en realidad), se emprende un viaje únicamente de la pequeña al lugar robótico, donde ésta observa las maquinas y sus usos cuando llega.

 Una vez visitado todos los cuartos de una puerta con el mismo nombre de programación con la cual la niña entró, se presenta la sustituta de la abuela: Un asiento parlante del cual trata de hacer actividades con la niña, como si fuera su nieta. La pequeña con su pelota y sus fotos, tras el desagrado de la interacción con el robótico asiento, le produce un agobio tan fuerte, que trata de escapar del lugar. El asiento, al darse cuenta que no estaba en la misma habitación que ella, la busca y la encuentra. Finalmente aparece su ser amado: Su abuela, que al llegar ve a su nieta en el piso acurrucada por temor y por desagrado a la suplente, es abrazada inmediatamente por su nieta. Finalizando el relato grafico, cuando la señora apaga el parlante objeto, sentándose ella en el asiento mecánico con seguridad y sin temor, llamando a su retoño a que se siente con ella. La pequeña niña se acerca y se acomoda con todo el alivio de estar segura con su abuela. Tras todo lo que pasó, la abuela le narra un cuento a la niña y finaliza el rodaje de 30 minutajos.

¿De que va esto?, Por si la cosa no es clara, estamos hablando de una sátira opresiva, una critica implacable a la automatización de la vida y a la deshumanización de ésta, por medio de la tecnología y la influencia que ésta puede causar a la gente. Una dura temática que se expone con el relato de una abuela y su nieta, sumergiéndonos en el fondo sentimental que carece la robótica, mientras las personas al día de hoy pueden fanfarronear de su celular con 6 pantallas, una definición mejor que la vista, el tamaño de un cuaderno y etcétera. Ese sentimiento irremplazable lo impregna Trnka en menos de una hora. Y como si no fuera poco, el recurso no es ni de un trillón, ni de un elenco de súper-estrellas. Pufff…”Echémonos dos títeres, un plano miniatura, media hora de corrida sin diálogos y una historia que valga la pena verla”, de seguro eso dijo Trnka & Compañía, cuando vio que se puede hacer mucho, con tan poco. Y sanguijuelas, si no pueden apreciar eso, no podrán apreciar nada.

En otro aspecto, es una invitación para los arrogantes que se pueden más los films soterrados de Finlandia que “El Padrino”, como también para los amantes del buen hacer. Y si hablamos de un entorno técnico con la elaboración de este relato, nos perdemos en su sutileza y elegancia: Los títeres, habiendo únicamente dos personajes humanos, sus emociones y diálogos son hechos con gestos corporales, donde no se incluye los estáticos rostros, que no hacen nadita de problema en el asunto. La música: es penetrante, insistente y resonante. Pero lo que más me gusta es que ahonda todavía más la esplendida e ingeniosa temática: Por veces se escucha melodías muy dispares o harmónicas u otros tipos de instrumento de viento, pero cuando llega un órgano fúnebre a profundizar lo oscuro y opresivo tramo, es un lujazo. Solamente rescató esas dos vertientes técnicas, porque me parecen lo más sobresaliente..Ufff..

Animación forjada con sentimiento, proyectando una vista negativa sobre el dominio de la tecnología y las consecuencias que pueden pasar si absorbes como esponja la utilidad y la facilidad de estos usos mecánicos, aislando la humanidad y crear un prototipo automatizado tanto de las cosas insignificantes como las cosas más importantes en la existencia. Semejante Propuesta. Es como echarte un relato corto de un libro y resulte que tenga agallas de hacerle frente o sumirle la cabezota a los grandes de los grandes. ¿Jiri el ”Walt Disney de Europa del Este”?, Puff..Este checoslovaco es otra escena y nivel. Gente como está, representa su nación con honores y perdértelo es castigo total cucaracha!

Y sí, sátira, animación y ciencia ficción. Es lo que es: “Kybernetica Babicka” (La Abuela Cibernética) es Imprescindible en el género, Maese. Jiri Trnka, pasó de germinar relatos típicos de su tierra ha cometer en su ultimas instancias como pieza fundamental en la animación por medio de marionetas, el toque critico y pesimista que hoy me ha forrado otra tónica y otro utilización con la palabra: “Ciencia Ficción”. Pues nada, ¿quieres calidad?, aquí la tienes y deja de relinchar.

“La abuela cibernética es a la vez un poema, por la diferencia de los sentimientos que intervienen la riqueza psicológica, todo lo alusivo e inexpresivo, y un ballet en una atmósfera futurista, con decorados sobrecogedores. Esta parodia trágico-cómica protesta contra la automatización de la vida del hombre, contra la esclavitud de la técnica”.




Nota: 8.5


Publicado Por: Zdzislaw Beksinski


lunes, 8 de septiembre de 2014

George Lucas – THX 1138 [1971]


  
(Ese cartel es lo que se dice: Buenaondístico)


Sublevado y militante Filme el que traemos el día de hoy. Cosecha fresca, a pesar de ser añeja, refreída y maluntada. Aquí Tenemos el Debut de George Lucas; nada de Star Wars y esas mamadas. Estado Pure, sin miramientos de Chewbacca, espadas, láseres grasosos, alimañas jarjabinescas. Coppola poniendo porudcción y pertrecho de guerra, para que aquel incipiente Lucas empezara de buen rollón. En plenos ’70, y de arte de magia nos cae ‘THX 1138’ película “Sci Fi” tomando cobertura de “Odisea al Espacio”, “El planeta de los simios” ambas “pulcrándose” en meollo ’68 de las superproductoras de Cienema matón y con repliegues exquisitos, para chuparle las falanges.  Ya no hay excusas encorsetadas sobre que el ’70 aún era pantalla amarillezca, ángulos vetustos (Central, Normal y a veces el Nadir) ni miercoletes.

Cinta de casco de armadura, tomando influencia de obras “vernescas” de los esbirros George Orwell, Adolof Huxley, Asimov, Clarke, Wells… en fin piara “Fan fiction” Pero, Lucas propondría albur del escanciado y espumoso para algunos. Metraje atragantador si estamos acostumbrados a Star trek y compañiputas encima. Todo empieza con un reverb de los filmes de ciencia ficción de los años ’50: máquineismo perijoyado, de argamasa tembleque, casquetes de baja calidad, todo metálico y frío, enervado pues. El filme se recrea en peñas pociones de “realismo” dentro de lo que cabe. Basada en la idea de totalitarismo; en una faceta más cerca a esto, es la metalúrgica compañía que tiene lugar por gobierno, y es así sociedad subterránea, impoluta, más pulcra que la asistencia aséptica del mundial en los barrios malvistos o de mala imagen. 

El film fue un ejercicio del trabajo que realizó Lucas en sus últimos menesteres como estudiante de cinematografía. Me quedo consternado aquel que encandile por los comments la cinta de 16 minutjos que se respinga por web sobre THX del 68, 69. La historia tiene lugar con Cyborgs como la policía, los marramos por todo el mundo, los aluminicos gendarmes; agentes automatizados y dopados con altas concentraciones de destructivos químicos, que petrifican el estado vivificante del ser en cuestión son los individuos que cohabitan en las salas de trabajo alienante; escenografía claustrofóbica de bajo presupuesto: fondos blancos, mara pelona, trajes  purísimos.. ¡Automatismo puro, vaya! 

Inmiscuidos nos vemos en un esfuerzo que nos muestra la regularización excesiva, los métodos aprehensivos de conducta que, son ejercidos, por los mismos individuos autómatas en puestos más elevados y realzados por su intachable medicación. Y no es un mundo muy grato que digamos. El sexo está prohibido, drogarse no. Eso sí, las sustancias son como la eugenesia de toda nación que elimina impurezas, pero en este caso antinómico ocurre lo contrario, porque aquí no se eliminan, se utilizan  en demasía para fines productivos, siempre y cuando controlando la conducta. En esa cárcel llamada hogar-trabajo-reciento también hay factores lúdicos o distractivos: danzas de negros para la excitación, bocas de plástico para ricas mamadas, información de índole sistemática-corporativa-exclusivista.
                                                                                                                                                            
Las cosas salen mal cuando el individuo –Porque no hay otra distinción para calificarlo, ya que sólo porta un número y un prefijo- THX 1138 (Robet Duvall) reniega su dotación, y a su vez contrae sexo con su compañera de cuarto, en pos, esto ocasiona que THX deje “encintada” a su compañera; un amor se desvela entra los individuos, algo que va más allá de la conducta robótica que la mayoría adopta bajo mecanismos de control, y de ello nace sentimientos humanos que se habían sustentado en represivos castigos. Una excelente alegoría hacía las circunstancias que nos hacen un ser “sentiente/pensante” que juzga su naturaleza mediante la experiencia, y, no guía su conducta por el más férreo adiestramiento canino. Más apabullante es el tramo donde tenemos una figura como un Om con la apariencia de Jesucristo; da mensajes espirituales, consumistas, pasivos… y cínicamente de Felicidad. Cómo si se pudiera ser feliz con correa, ¿no?

Cuando Don Duvall no encuentra a su compañera, por el desencadenado sentimiento que éste siente, hay que salir de la fábrica. Una persecución cunde en el último entramado del celuloide. Es gracioso que los recursos escenográficos-gráficos y efectos especiales, no fueran detallados con bandas sonoras que se pasan de sonoras; esto se ha dado en los últimos años, y bueno no es dar más a que con Star Wars las cosas cambiarían… ¿Creen que a mejor? Háganme una felación de la buena, mejor. 

Cataclismo algo concentrado, imágenes sugerentes y poco ambientadas, más maquinales y lúgubres por ser tan mecánicas.  Interpretaciones fluctúales: cambian dependiendo la tónica que suceda, sin mucho recuento. Mensaje más portentoso que nada. Puntos bajos, en el decaimiento y falta de ritmo de la cinta, haciendo pegajosa en veces; un detalle es suspendido por la valla de óbices en la persecución. Muy buena, la verdad.   
Chingona, pero no aporta ni pasteles. Ay de aquel que diga que es obra maestra, si lo dice, pues, pene encaje en boca, recuerden.



Nota: esmerado 6.5 ...y eso que me paso de regalón.



Publicado Por: Albert Spaggiari.