miércoles, 8 de agosto de 2018

Arraigo - Fronteras y Horizontes [2012]





Folk + Metal. Hace 40 años o menos; Nadie, absolutamente nadie, se iba a imaginar la simbiosis de géneros tan disímiles que gozamos actualmente, y que a día de hoy, tan asequible para los morros. O eras un superdotado topo de nariz estrellada o tu cerebro veía multiversos paralelos. Ni si quiera estamos presentando Mathcore, ni Free Jazz, ni Djent, ni nada de esas raleas. Estamos presentando un llano Folk Metal, que en su tiempo, o en el contexto en el que nació o se popularizó, dio rienda suelta a la creatividad. Pero, no todo lo que nace como “innovación”, es necesariamente innovación. Quiero decir: El Grunge no es un género y se vio como la galaxia recién descubierta cuando pegó en los medios. Caso similar, pero no tan afortunado, el del Folk Metal. 

Cambiando el tema de toda la polémica y la bulla de pubertos en defensa de la debatible existencia del género, o del aporte, o “pureza” que éste pueda dar en el Metal o en la Música, hoy nos encontramos con una dosis de Metal Argentino. Precisamente de Arraigo, grupo el cual se formó por el 2004, logrando hasta el 2012 su debut, confesando ellos la ardua labor que se tiraron al lomo estos argentos para manufacturar: “Fronteras Y Horizontes”. De antemano, sabiendo eso, NO encontramos el laberinto compositivo de un Progresivo, pero tampoco es simplón sin gracia.  Estamos ante una agrupación profesional que se esmeró.

Pues bien, Mariano Trangone (Vocalista, Bombo Lenguero, Teclados y Cajón Peruano) y compañía, no solo ejecutan el característico sonido del Heavy Metal, sino, adhieren todos los elementos y las fuentes folclóricas de su país. Encontramos tonalidades a milongas, zambas, murga y sonidos andinos con instrumentos tradicionales como el charango o el bombo leguero, inclusive, hay una portentosa simbiosis de Tango con el Metal dentro de las estructuras. La efectividad de todo esto radica en la solvencia para mezclar los ingredientes y no afectar el contenido. Arraigo conjuga aceptablemente las fuentes andinas y nativas con el Heavy coreable y Metaloso, aunque éste termina de desfallecer un poco en creatividad con unos Riffz flácidos que solo aportan presencia, pero no imaginación; caso contrario con los Solos de Mariano Perret, en los que destila cuidadosa melodía. Canciones como “Zamba para los Huérfanos” o “Para Aquel que sabe Oír” son ejemplos de tracks bien conjugados de lo que se llama Folk Metal Argentino. Y no es casualidad que se tomen más de 7 minutos en los dos temas para elaborar la fórmula.

En cuanto a la destreza vocal, Trangone expele el sabor argentino pero con dotes y expresividad en cada tema que evidencian la pasión, potencia y presencia cuando narra o les da ritmo a las liricas. Excelente.

El disco fluye naturalmente, ya sea si lo dejas reposar o estas en un mascón con esto de fondo. La verdad da igual, es asequible y sencillo para el oído Heavy. Lo facilita bastante Trangone con la expresividad de sus estribillos y coros.

Ahora bien, Arraigo peca de extender el tracklist hasta la hora y pico. Molestia de metraje para un servidor. ¿Por qué es largo?, Neles, sino, porque carecen de dinamismo y magia con ésos 20 minutos que ofrecen desde “Los gritos del Sótano” hasta “Cadenas y Antifaces”. Se repite el esquema y se palpa la llanura compositiva. Haciéndonos creer que más allá de retomar la historia andina y demás folclore, ocupan ése mismo aderezo como excusa o pretexto para no sonar como banda de Heavy de tercera y caer en el olvido. Además, “Te llamo Eternidad” es horrenda a rabiar.

Cabe destacar, que la riqueza de “Fronteras Y Horizontes”, es la de ofrecer impunemente música puramente acústica, tanguera y folclórica con charangos, bandoneones o acordeones, el canto de Trangone a cappella con el bombo y meterlos lógicamente en una estructura de Metal. Y repito, salir ilesos es un logro, pero salir victoriosos, creo que es mejor. Me refiero: Las pretensiones del grupo son claras y prácticas, pero habiendo logrado una textura homogénea entre el folk y el jebi, se quedan casi en la llanura de lo simplón. Debido a que la fórmula no es ambiciosa (ni espero que sea), y crean ésa sensación de haber podido hacer más, y terminan con un, por ejemplo: buen estribillo que es interrumpido por un charangito bonito acustiquín. No es nada malo, pero se presiente que hay más, hay más cosas que un estribillo bien logrado y un acordeón infiltrado entre la muralla sónica. No lo sé, impresiones puramente subjetivas.

Destaco “Que sangre Madera”, un Tango como Diosito lindo manda. Eso al menos es variedad, no los putos 20 minutos de Heavy aguadón que sobran en el CD. No obstante, entretiene y se disuelve en la memoria esos cambios folclóricos y ésas melodías sutiles.
Arraigo cumple.
Recuerden: Folk Metal no es Metal cantado por Trolls y duendes sobre la mitología celta, hay un mundo más allá de los estereotipos, y demole sentido a las asquerosas etiquetas musicales

(que bonica portadica)




Nota: 6.6


Publicado Por: Zdzislaw Beksinski


jueves, 19 de julio de 2018

Festín del Folklore Metaleño: Especial de Folk Metal

Metal folclórico para los niños ratas!!!!

Así es bestias peludas del bosque de Waipoua, regresamos con la sección de puro FOLK METAL!!! A explorar un poco este género tan denostado y menospreciado. Intentaré sucumbir a las delicias de las flautitas de parvularios con metal simplón A indagar en los diversos sonidos folcloricos de distintas regiones. Desde los arios nórdicos de 3 metros barbones hasta los morenazos musculosos pre-hispánicos.

La idea es meter variedad, y a la vez, sumergirse al análisis de un ¿supuesto género o género establecido con bases? Pues todo eso, a la vuelta del riachuelo místico nos veremos con toda la parafernalia del medioevo de éstos músicos florifundos crucados y traumados!!!

Veremos si encontramos un gnomo o un impostor en éste bosque peludo!!!

A Soplar la verga!!!




Publicado por: Zdzislaw Beksinski



domingo, 15 de julio de 2018

El Mito Y La Mita cumple 5 años!!!


Perras y perros, hemos llegado a una circunstancia que pocos, poquísimos, se puede jactar como un arrogante de mierda: cumplir 5 años de música universal en un blog. Muy cierto: la inconsistencia es casi perenne cuando se trata de un individuo frente las adversidades personales y musicales. Pero.... Acá estamos, acá estaremos, SIEMPRE.

Bajo nuestras espaldas puedo acreditarme como un buen pedante de mierrrrda, que se ha hecho justicia a géneros y a discos que, o bien: son archiconocidísimos, o del submundo; pero pese a la cantidad inconmensurable de reseñas y tiempo aprovechado en lo que más se ama en esta vida: LA MÚSICA, se puede con toda seguridad, esbozar y concluir una grata sonrisa de gratificación por parte mía, gracias a todos los ratas que descargan y a toda la pasión con la que se hace este blog, y por eso.....

Felices 5 años de cumpleaños de este bebé deforme y cultural llamado: EL MITO Y LA MITA


"Que se haga la música"






Publicado Por: Zdzislaw Beksinski


jueves, 28 de junio de 2018

Nervosa - Downfall Of Mankind [2018]





A tomar la leche, zorras!!!

Cuando hablamos de un trío de féminas, no soportamos la picazón en el hongo, no pensamos otra cosa que la explotación sexual de la mujer en todos los putos medios. Pero hoy, hoy toca tomar la leche. Sí, el caso que nos compete no es porno, es música. Y hablando estrictamente de música, analizando el contexto mercantil, es algo extraordinariamente atípico ver un grupo de Metal conformado solo de mujeres que no se vendan por medio de su imagen. Y repito: extraño. No porque los músicos quieran vender más el envoltorio que el contenido, sino, porque los productores y las discográficas resaltan a cualquier pendeja bonita que toque chueco, como si fuese una diosa. Abundan ejemplares soberbios y masivos de mujeres dentro del Metal que no han sido vendidas por su imagen y tocan mil veces mejor que cualquier Barbie prefabricada, pero… ¿Acaso ellas tienen la misma popularidad que un Metallica, o un Slayer?, ¿Acaso tienen mayor popularidad ellas, que las que enseñan las tetas, o tocan en vivo desnudas? Precisamente ése es mi punto. El funcionamiento del mercado musical en las mujeres: Te conoce medio-mundo si elaboraste algún tipo de controversia o carga sexual de tu imagen, de lo contrario: tu perfil es bajo. Así como es arte la música, también lo maneja un mercado detrás para promocionarla. Aclaro, seguro cualquier persona de a pie ya sabía esto.

Sin rodeos, vamos al ejemplar de Thrash que nos concierne para cerrar este especial: Nervosa, banda brasileira de la nueva camada de Thrash Metal del siglo XXI. Muchachas oriundas de Sao Paulo, Brasil, fundaron en el 2010 lo que al final sería un trío modesto de músicos amantes del sonido tradicional con su huella particular. Y es que, desde que Prika Amaral (guitarrista) comenzó a reclutar gente, las ideas eran claras y concretas: hacer puto thrash metal perrón mueve-cervicales.

 En 2014 sacan su debut “Victim Of Yourself”, donde sembraron una costalada de trallazos que cualquier Thrasher empedernido que se precie le agradará. En 2016 sale “Agony”, más Thrash virulento y enfermizo para los tímpanos. Finalmente, en el 2018 se sacan de la manga lo que fácilmente se podría considerar como su cénit, su cúspide musical hasta el momento: “Downfall Of Mankind”. 

Para los que están duchos en la discografía de las muchachas, sabrán por excelencia que la fórmula que desempeñan no es sorprendente, ni mucho menos de virtuosismo barroco en las composiciones. Como dije: Thrash Directo. No hay más. La reseña se podría acabar definiendo al grupo de tal manera y no me quedaría corto. Ahora bien, ¿qué hace de ésta tercera entrega, algo especial? Pues, como se podía vaticinar desde sus publicaciones anteriores, hay un conjunto de Riffs machacones de Prika que nunca faltarán, el “martillante” golpe de la batería y el bajo tampoco, mucho menos la presencia desgarradora que tiene la voz de Fernanda Lira. 
Pero… hay una evolución notoria: La pesadez de las secciones rítmicas se han elevado y conjugado con la plausible Fernanda que, literalmente, atruena y destroza con su timbre desgarrado y casi-gutural que penetra en cualquier cerote que escuche el disco. Notables ejemplos: “The Bleeding”, “Horrordome” o “Vultures”, que casi rayan con esos tempos crujientes a un Death Metal. Ésa densidad y pesadez gravitando en las composiciones estaban ausentes en el celebérrimo debut, algo que hasta ahora escuchamos. Que pese a no tener recursos variopintos y aferrarse a la practicidad, el endurecer el sonido es un punto álgido de madurez musical.

Luego, está ése inherente ADN de Thrash directo a la yugular, con estribillos matadores acompañados de un machacante ritmo, como el de “Never Forget, Never Repeat” (MI FAVORITA), en el que sintetizan ésa pasión metalera, en 12 canciones (sin contar la Intro) como un conjunto homogéneo de temas perforantes y sencillos. Tanto es así, que hasta pueden pasar desapercibidos algunos temas. ¿Achaque en una música llana, mortífera y entretenida? No lo creo. Ya sabemos lo que nos esperamos, y eso es producto de la redondez y consistencia. Todos los tracks se distinguen, pero no sobresale uno o dos.

Claro, no cabe duda, una vez familiarizados, nos saturarán hasta el orgasmo tramos impecables de batería por parte de Luana Dametto (escuchar tramos rítmicos como el de “No Mercy”, uffff…), el exorbitante dinamismo de las cuerdas de Fernanda y Prika, Bajo y Guitarra respectivamente, y cómo no………….. La Voz, si antes nos deleitaba Fernanda Lira con su punzante y lacerante voz rasposa manteniendo un grito o el “feelling” cuando ejecuta los estribillos, ahora acrecentó su técnica vocal para alternar o fusionarla con una guturalidad semejante al Death Metal. Y no solo eso, dosificar perfectamente en los tramos más trashers, o los más demoledores, o los más rápidos. Y la sorpresa también con ése “Selfish Battle” que apesta a refrito de Painkiller(album), pero se ve el “canto limpio” de Fernanda, dando dotes que no tenía antes.

¿Cómo Napalm Records ficharon a éstas hermosas señoritas que pululaban en la misma suerte que otras bandas que hacían lo mismo?, ¿Cómo, para su desgracia regional, unas tipejas dieron un salto al renombre internacional sin ser la panacea?, ¿Cómo es que ellas sí terminaron haciendo grande el nombre de NERVOSA sin ser unos Vektor (por ejemplo)?. Claro: la fortuna no es aleatoria en ciertas ocasiones. Fernanda Lira ha profesado que ellas han relegado y denostado toda ocupación laboral, o tipo de compromiso familiar, etcétera, para salir bajo el respaldo de una compañía gringa enorme que les abría a importantísimos conciertos, que, como consiguiente tenemos, en síntesis: Un Buen Thrash Metal Pesado y Directo, y bien logrado.

Eso sí, lo que nos depara Fernanda Lira Y Compañía en el futuro podría ser pasos a algo mejor, pero por el momento: una notable evolución, y un notable “Downfall of Mankind”, recomendable a cualquiera que guste del Thrash Metal. Buen logro por NERVOSA

A tomar la leche!!!! 






Nota: 7.7


Publicado Por: Zdzislaw Beksinski



sábado, 3 de marzo de 2018

Vektor - Black Future [2009]




Dentro de la nueva camada de Thrash Metal encontraremos mayoritariamente un sector aferrado a la “nostalgia”, mejor dicho al refrito, en el cual practican música más para el desvergue de coverear a sus vacas sagradas en un bar fétido, antes que componer en realidad algo que se despeje del pegajoso semen de sus dioses. Si bien, es cierto que para crear el invento debes de tener una creatividad superior a los demás; y en ése aspecto los incipientes ni se deben de fijar. El punto y meollo del asunto, no es quién creó y quién no, si no, ¿Quién tiene los huevos de dinosaurio para interpretar un género bajo tu personalidad? Pocos cerotes se dan los trompazos con éste punto que tantas veces reitero en las críticas, y uno de ellos que ha logrado éste fin, es VEKTOR. 

Provenientes de –que raro- Estados Unidos, la bestia del Thrash escupía de sus fauces por el 2009 su debutazo en una escena de replicaciones a tope, de los revivals entretenidos y uno que otro loco sonando con ingenio, éste último es el caso que nos compete. “Black Future” embellecido por el aura Sci-Fi, Voivod, Técnica, y hasta Violencia y Brutalidad por todos los costados. Me pregunto: ¿Cómo carajos, después de mi discontinuidad de escribir (mal, que quede claro), se puede redactar o plasmar por escrito una semejante obra hora y ocho minutos de puro Thrash? Imagínense y figúrense un tramo tan largo al cual no aburre en ningún momento, siendo un género que peca de un supuesto minimalismo en sus composiciones.

Vektor lo tenía y tiene claro: Hacen Thrash sin preceptos ni prejuicios a la hora de componer. Claro como el culo de un gato albino. Laudable y plausible aquél que diseccione cada rincón de técnica enrevesada, la cantidad exorbitante de matices progresivos y la inherente pesadez del Thrash más virulento y extremo que factura el monstruo David DiSanto y Cía. Y es que extender tracks como: “Forest Of Legends” o “Dark Nebula” para incursionar en parajes y texturas ambientales de perdición y desolación, como auguraba la magnífica portada, logrando una hibridación de la técnica más depurada con la áspera garganta de DiSanto que roza el Black Metal. Y ya no digamos la grandilocuencia que contienen estos dos temas, ufff…

     Thrash Progresivo de alto nivel compositivo. Encontraremos momentos puntuales del disco, desde el crudo y directo cañonazo como: “Hunger For Violence” o “Black Future”, entre otras tesituras del headbanging más clásico y los BATAZOS del señor Blake Anderson, hasta múltiples cambios rítmicos y una ambientación lúgubre acompasada al deslumbrante virtuosismo instrumental de Nelson y DiSanto en las guitarras, sin dejar atrás una soberbia base rítmica que muele a trompazos junto a esa raspada y visceral voz, ufff… ¿Se nota la excitación ante un trabajo tan bien marinado? Y es que, no solo sorprende el arduo labor que supuso interpretar música sin hedor a influencias vetustas o a interpretar un estilo que ya había pasado su gloria por más de 20 añetes, y vienen estos tipejos, que claramente beben de los aventurados de su tiempo para ser ahora ellos, los aventurados de su/nuestro tiempo.

Que no se nos vaya el pulso!, no estamos ante la excentricidad pura, no estamos ante la cobra de dos cabezas. Pero, por la gran puta!! Estos cerotes son un remolino de aire fresco que merece su valía como uno de los pocos especímenes del Thrash actual que innovan con lo poco que ha quedado en el pozo, y ojo, no quiero ahondar y sumergirme en el impecable virtuosismo que constantemente palpan. Y es que, ESO, sin carecer de todas las características de un estilo al que supieron bien REINTERPRETAR.

Me privo de detalles, escúchenlo ustedes mismos. 

Enserio, si a alguien le gusta el Thrash Metal, y no le gusta esto, no lo entiendo.    







Nota: creció con el tiempo, 9.9


Publicado Por: Zdzislaw Beksinski



viernes, 19 de enero de 2018

Morbid Saint - Spectrum Of Death [1990]





Cuando parlamos de Thrash Metal, por obligatoriedad tenemos que remontarnos, ya no solo a la “era dorada”, sino, al “declive”. Supuesto declive patrocinado por la Bay Area que involucionaba –por decirlo suavemente-  a la comercialidad de las nuevas mareas del contexto musical de aquellos tiempos. Sin embargo, tenemos que remontarnos al polo opuesto, al otro lado de la moneda, o como mejor se describe: El rostro más feo (en el buen sentido, obviamente) del Thrash Metal. El Death Metal andaba con el garrote suelto desatando obras magnas de la música, el Black Metal estaba dispersándose y erigiéndose como un género ruidoso y majestuoso. Entonces, el Thrash perrón en su esencia, al que todos estábamos acostumbrados opta por dos senderos pedregosos para salir ileso de una muerte prematura: El virtuosismo o la técnica de ejecución y composición en un género aparentemente llano y plano, y, el que nos compete, mis marmotas: La pesadez y la violencia hasta sus confines.

A ver…. Hablamos en teoría de 1989-1990. Mekong Delta, el “Rust in Peace” de MegaDave, Voivod, Coroner y demás pajarracos, daban las pautas para expandir el “tupatupatupatupa” en una fórmula matemática, eso sin perder el ADN. Gigantesco aporte el de los mentados en cuestión del “Thech Thrash”. Ahora bien, las eyaculaciones de la Ola Germánica de Thrash trajo venideros hijos que le levantarían la mano con arrogancia e ímpetu a sus tatas, hablamos de la híper-violenta escena, comandada de bestias como: Sadus, Merciless, Protector, y… MORBID SAINT. Este último, herido de cicatrices, al cual, vamos a desmenuzar.

Oriundos de una cloaca de Wisconsin, Morbid Saint pasarían de ser teloneros de Death y acérrimos a la bolsa escrotal de Slayer, a imponer respeto con su placa: “Spectrum Of Death” lanzado en 1990. Curioso destino arropó a “Los Saint” en el underground como “banda de culto”, gracias al fugaz remolino de sangre y fuego que dejaron en la memoria de todos. Si bien, los chicuelos se formaron en 1982!!!!, pero faltaron 8 años para ver el rostro avejentado y lacerado de la abuela de Eddie en la portada. Y encima, al indagar, uno se da cuenta que la desdicha es aún más grande: Tenían (y tienen) material que no se pudo publicar por cuestiones meramente de productoras, discográficas y demás. Señores, algo lógico y triste que le pasa a los grupos de estos pedigrís, Demo´s en demasía, ideas claras y ganas, pero si no te lo agarran, ve tú a un rincón del baño de tu compaye a grabar un cassette con producción de sótano, a ver si cuela por el mundillo.

Luego de fulminar a la mara subterránea con la Demo “Lock Up Your Children” en 1988, dos años más tarde, los sinvergüenzas meten todas, TODAS las canciones del Demo y las brutalizan más (si es que es posible eso). Amiguitos, eso demuestra la frustración de que no vean a la luz tus MIERDAS en el momento. Lo mismo pasó con “Destruction System” del 2015. ¿Falta de ideas o grabar canciones  decentemente que forjaste con esmero y dedicación?, En mi opinión, las dos razones son válidas.

Para los que nunca han escuchado a los endiosados Morbid Saint, dejarlo claro de antemano cipotes: Thrash Perrón de Carnicería Humana. Eso es lo que expresa este trozo de brutalidad. El Thrash llevado a su límite, sin híbridos ni artificios de otros estilos. El Guitarrro: Jay Visser (o mejor conocido como El Tío Cosa del Thrash) ha cargado al monstruo por añetes, y su pulcra idea de machacarnos el cráneo con sus indomables e insistentes Riffs lo dicen todo. No hay presentación más ad hoc para una bestia traga-sangre y huele-mierda como lo es el track: “Look up Your Children”: Cabalgadas, trotes y martilleos de instrumentos incesantes. La Base Rítmica se luce en todo el puto álbum como una sólida tanqueta pulverizadora. Esto es así compayes: Directo, Ruidoso, Brutal y hasta Jugoso si me apuran. 3 minutajos como El Chamuco manda, cerotes.

Acá no hay espacio para Riffs bailones y festivos, ni siquiera para los pesados y pegadizos!!!, estos hijos de puta se ganan la reputación de monstruos gracias a ese “algo” que no tiene mucho grupejo que se hace llamar deudor de lo extremo. Es cierto, el hedor de Petrozza en las vocales existe, el tufillo de esmegma de Slayer en las Guitarras también, la intensidad y el descaro de unos Possessed también; pero OJO, esto no es un vástago ni un homúnculo de los maestros, esto es, sin temor a equivocarme, el hijo y la evolución de la música de los tres mencionados sin siquiera sonar a una puta copia barata, adquiriendo, como todo hijo debe de hacerlo, una personalidad propia que lo distinga entre los demás. Eso lo ha puesto en la mesa Morbid Saint, que no quepa duda de quién carajos estamos hablando.

“Assassin” es la evidencia fehaciente de lo que propugno. Imagínense dentro de 7 minutos, un desquiciado cantando como si estuviera en el mismísimo infierno, junto a un extenso, plano y grueso tono de guitarras que solo se acoplan al martilleo inhumano de Lee Reynolds en las batacas. “Scars” casi más de lo mismo. Dos temas largos, que o bien te atrae esa abrumadora estampida o te muelen los tímpanos a vergazos y los desprecias. Esto es en concreto la esencia de Morbid. Haciendo un paralelismo ridículo, en la misma fecha sale “Altars Of Madness” de Morbid Angel. Y sin discusión alguna, son dos bandos distintos, peroooo… ¿quién suena más mugriento, cochambroso e inasequible para el oyente? Posiblemente los Saint, y si tienes dudas, mira los solos de Vissser, las composiciones que parecen una plasta de mierda fundida con lava que te cae encima sin piedad. Nada de Técnica ni virtuosismo, acá solo existe MATAR al oyente, espantarlo, pulverizarlo con todo lo que tengas. Esa lección la ha aprendido bien “Spectrum Of Death”.

 A medida que desmenuzas este cadáver, te topas con joyas como: “Damien”, “Crying for Death” o “Burned At The Steak”, que no hacen más variación alguna, intensifican más la monótona pero exacta palabra: BRUTALIDAD. 

Avisados están: Si no eres del gremio te va a costar digerir esta carne cruda, porque las composiciones son 100% aplastantes y casi inmutables, a excepción de algún momento en concreto que puedas paladear. En fin, “Spectrum Of Death”: Ejercicio puro de violencia y masacre Thrashera. Conclusión: Buen Discote, pero que no se nos pierda el rumbo al decir el tópico “Obra Maestra” a cualquiera.

O mosheas hasta que las cervicales te las extirpen o huyes a merendarte un poquito de Pink Floyd para suavizar el tímpano.






Nota: 8.0


Publicado Por: Zdzislaw Beksinski


domingo, 7 de enero de 2018

Especial: Calentando los motores y la verga en este 2018 con THRASH METAL!!!!

Despierta nuevamente de uno de tantos comas en los que sufre el blog para aceitar la pija peluda y eyacular reseñas para este nuevo año 2018

Empezamos el 2018 como buenos cavernarios mentales de bar chuco de la esquina con pelo tiezo: THRASH de todos los sabores hasta que el esmegma y los cayos de los uñeros se pudran en nuestro cuerpo putrefacto y sucio.

A Disfrutar del BUEN Thrash Metal señoras, calentando el blog con BUEN MUSICÓN DE BOLO DE BAR MALOLIENTE!!

 A agitar la sesera y la verga al son del ritmo, los escupitajos; y una birria tibia mosqueada!!!!




Publicado Por: Zdzislaw Beksinski