Otro caso donde Dios le da pan a quien no tiene dientes…En una escena que estaba más poblada que
los piojos de un perro tirado, una escena que se comería al mundo entero en la década
de los 80s, si usted nunca escucho nombres de la movida Thrashera, como
Metallica, Exodus, Megadeth, Slayer u otros mil cerotes que hubieron rondando,
es porque no le gusta la música o porque anduvo mamándole el sombrero a Slash y
otros compadres. El fin que quiero dar, es que detrás de esa creciente y tormentosa
música que se inclinaba a lo más extremo, también tuvo sus otros secuaces…Aunque
muchos podrían llegar tarde, siempre podían ofrecer su música: ya sea
copy-paste o calidad de verdad. Pero algo que no le negaría a nadie es que no
tendrían tanta popularidad como muchos monos de circo que la tuvieron.
No, no hablo de
bandillas del Revival calcado de sus influencias. No nos vayamos tan lejos, que
tampoco me entusiasmo mucho. Hablo de esos grupos que son de esa era y no
supimos ni una Jota de su existencia hasta ahora, que nos ponemos exploradores
con el internet. La que presento ahora, es de la USA, la nación que saca sus
bandas como hormigas en un hormiguero. Pero no cantemos la verdad todavía,
porque la inquietud de este grupo emerge de una ciudad desmeritada en el Metal:
Texas. No solo hay vacas y culeros en esa ubicación, juzguen ustedes mismos a
Pantera y D.R.I, que son de vital importancia en ramas diferentes, pero ambos
comparten ese ADN Thrash. Así que no jodamos antes de informarnos.
El grupo que sufrió todo lo antes dicho y
hecho, y tan esperado en exponer, es nada más y nada menos que Rigor Mortis. Un
cuarteto liderado por Harden Harrison en la Batería y el bajista Casey Orr, que
se les uniría el difunto guitarrista Mike Scaccia a la guitarra junto a la colaboración
del vocalista Bruce Corbitt para lanzar su primera mandarina auto-titulada como
el nombre del grupo, con clara afición al cine de terror, recordando el filme
Mr Vampire y otras similitudes enfermizas que asimilen musicalmente con la
rigidez cadavérica. Sin duda alguna, nos preparamos con tal idea expuesta que
quieren dar con el nombre, aunque la portada sea simplona e infantil, no
podemos quedarnos con la angustia de saber si será o no, una bestia
descarrilada.
Tal parece que el
Thrash no se volverá un pony enojado mientras viva la llama de dolor y pasión. Los
Tejanos lo demuestran con una gama de técnica y dirección completa a tu funeral.
Nos vemos en la situación en que lo “Technical” no solo es masturbarse con la
guitarra, ni tampoco debe de ser un laberinto. Puede que la técnica compositiva
funcione para armar el rompecabezas sin ningún fallo o para no atascarse a lo
mediocre con los instrumentos. Precisamente la virtud de los Mortis radica en
ser tan directos y desgarradores como técnicos con una gama Speed que fluye por
las venas del álbum. Pero lo más importante, rodando con coherencia
instrumental sin esperas, ni interludios, ni contemplaciones, ni nada. Directo
a la yugular, como dirían muchos.
Con la apertura del
instrumental: “Welcome To Your Funeral”, nos acercamos a las referencias Speed
Metaleras y la furia desatada en un ir y venir de guitarra afilada, junto a la
batería que resalta su intención de no ser subestimado por un fanático cerrado,
saliéndose del tupa-tupa, que muchos querrán pedalear y tocar como pendejotes
por un buen rato, casi monótono y molesto. Pero aquí, es de premiar semejante
valentía de Harden, quedándole reluciente la labor con gran acople de maniobra,
sin perder el estilo que predomina la batería en el género. 2 instrumentos que
quisiera exaltar como un gallo en pueblo a la mañana, es la guitarra y la percusión,
ambas trotando como locos en diferentes ritmos en el instrumental de 3:30 y no
pararía si les dijera con más detalles lo que hacen las 2 fichas en varias
oportunidades.
En fin, cada engranaje
sirve con su singular toque. En este álbum, tenemos de todo. Desde esas que
parecen hits, hasta las más trabajadas. Pero antes de llegar a eso, tenemos que
nombrar esa alternación vocal que se utiliza. Un tipo a la escuela más Anthrax
con un poco más de furia y el bajista Casey, que nos remite a las tantas bandas
Death/Thrash que inspiraron a los grandes del Death. Pero en cambio, el rango
más utilizado es con Corbitt al frente, aunque sin duda alguna le da más fineza
y estabilidad al equipo, por eso la elección de contratar al sujeto. En fin,
las voces son muy destacables, no hay mala opción vocal en ambos.
Riffs más afilados
que el pene de un violador experimentado, un Bajo que trota como un gordo
sudado en un gimnasio y una cooperación que cuadra perfectamente, con un sonido
que define a la banda, con un debut que arranca las cejas de muchos y se atreve
a mirar a las grandes fealdades cara a cara. Temas como: “Demons”, “Condemned
To Hell”, “Re-Animator”, “Slow Death” y ese himno que dejan a cargo con Casey
Orr al volante: “Die In Pain”, son muestras de un Speedico ataque arrasa
vergas! Con coros bestiales y pegajosos, Riffs de ultratumba, como siempre puntiagudos.
Y sobretodo, actitud con ferocidad encima. Si estos temas no se te quedan en el
coco, pues eres de otro mundo o eres una faldera, así de sencillo. En gran
parte, la mayoría de mi gusto hacia el rostro de Rigor Mortis, es por esas
canciones.
Otras con más
capacidades interpretativas, sin llegar a corear el titulo como un desenfrenado
psicópata, son: “Bobily Dismemberment”, “Shroud Of Gloom”, “Vampire” y “Wizard
Of Gore”, aunque las ultimas 2 obtiene una belleza que incluye fraseos muy
cortos y precisos. Pero es imposible no quedarse adentro con semejantes
intermedios guitarrescos y ritmos bajo/batería que golpetean distintos rumbos,
una genialidad cuando se propone a esto, sabiendo que nuca retrae la fuerza y
rapidez del álbum. Y “Slow Death”, la incluyo en este combo más trabajado,
aunque la pongo como un diamante expuesto al sol, con tan brillantez que nos
lastima la vista. Y nos ponemos de rodillas a deleitar la musicalidad que
ofrece el descabellado inicio para parir un mutante en el intermedio de la canción,
con las voces duales y volviendo al inicio. ¿Quién dijo que lo memorable
tampoco asiste?, de seguro fue un idiota que no tiene caso.
Se me hace difícil creer
que los Estados Des-Unidos pateen en el culo un grupo que apenas nace y se
definen de la nada, como un big bang, como un chasquido de dedos, como un abrir
y cerrar de ojos o como una eyaculación sin aviso. Así, de repente con tanta
versatilidad y enganche, a la primera oferta y nos monten una paliza de gorila
destruye autos y nos avienten en un barranco desolado. Crudo y dolorosa es la
realidad que les tocó experimentar Rigor Mortis. Pero su calidad se demostró
ante todos en 2 álbumes y un Ep, tremenda trayectoria, sin lugar a dudas, pero
que mira fijamente a esos “grandes” que todo el mundo mastica sin piedad.
Momentos más
esplendidos es cuando la batería deja de ser batería, cuando la guitarra de
Scaccia se vuelve su imaginación, que dupla rompe ortos! Que manejo de cooperación
y equilibrio tenemos ante nuestras orejotas de conejo. La voz furiosa, ambas
voces más feroces que una jirafa en duelo, que compatibilidad, que estable son
las utilizaciones técnicas con la violencia chupadita de unos Protector, unos
primerizos Death y de una gran cuadrilla de Thrash rozando la muerte y la evolución.
Que todo ello sea eficaz y simple es una verdadera maestría en composición. Un
Bajillo desliza volcanes y comelón, con hambre de lava y dolor. ¿Y como no nos
vamos a esperar eso? Veamos los titulazos que tienen las canciones, que manera
de entrar al gentillo. Dejémonos de cerotadas y redundar, mejor pongámonos con
la fiebre y nos tragamos más la infección con “Rigor Mortis” (El vynil), para
terminar en la morgue sanitos y salvos.
Nota: 9.0
Publicado Por: Zdzislaw Beksinski
No hay comentarios:
Publicar un comentario