Lamb Of God es una
banda americana de Metalcore de inicio del 2000. Empezó tocando como una banda
instrumental, pero con la llegada de su actual y único vocalista “Randy” pasarían
a dejar ese aspecto compositivo y se dedicarían a componer música con ahora un
Frontman a la cabeza. La banda creció entre ese amasijo de tendencias,
nombradas por cierto círculo, de nombre: “New Wave Of American Heavy Metal” ya
se podrán imaginar porque surgió esa corriente apelativa entre ciertos “seguidores
y críticos” Está de más tanta verborrea, ¿no lo creen?
La ventaja que tienen
estas bandas noveles, ciertamente con
una trayectoria entre 10 a 15 años, es que no hay mucha variación entre sus
integrantes, ya que la banda cuanta con los miembros fundadores, por lo que
tengo entendido. Son: “Duane” en las guitarras lideres junto Willie Adler en
las secundarias o de apoyo, Chris Adler en la batería, Randy Blythe en las
vocales, y John Campbell en el bajo. Ya con
esto tendríamos el pack para empezar a hablar del álbum.
Vayamos al grano. As
The Palaces Burn es un álbum con mucho Groove referente a su sonido, con una
implementación de metal extremo: Tharsh y Death. Tiene cavidad con un sonido
más accesible y digerible, debido a sus composiciones juguetonas y vacilantes
por veces, careciendo de una multitudinaria estructura en sus composiciones y
granjeando en un nivel, si bien no técnico, pero si pesadon para la música que
vienen tocando. Iremos por partes: me refiero con el punteo y rifeo, y me
inclino en esta su parte más thrash, a saber que están rasgando a un estilo muy
a lo “Pantera” con esos amplios espacios de tiempo donde el guitarro en vez de
crear solos y secciones rítmicas intrincadas, está apelmazando trastes
entrecortados en rasgueos(A veces muy confundido con el estilo Djent. Muy
distinto, no confundir)
Ya vimos el punto
Tharsh, que están enmarcados por sus machaqueos de ritmos, que podrían ser
catalogadas como secciones rítmicas “Groovies”, esto quiere decir que los riffs
andan más preocupados en crear cortes que desplazamientos y trascendencias
continuas en intercaladas secciones (Véase en el rock de antaño o el metal
naciente), más bien andamos por un sonido más simple, pero directo, no a la
cara, pero si al mentón. Y antes de pasar a otro punto, de alguna manera esto
hace que una escucha ligera pueda ser muy placentera y didáctica, debido a su
cantidad moderada, diría yo que moderadísima en notas destructivas.
¿Donde vamos? a su
faceta más endiablada, esa careta extrema con seño fruncido: su Alter Ego, “Death
Metal” si bien su sonido no es puramente un “Death” tradicional o moderno, pero
no obstante, su vocalista emite ciertos guturales, semi más bien, que pueden
entrar en una categoría más pesada a la del Thrash; aunque, mis amigos, muchos
hemos comprobado que a veces eso no es del todo cierto, tenemos gente Thrasher
que nos hacen de inmediato rascarnos la cabeza y pensar: Puta, no sé que
carajos tiene de Thrash esto (Véase en Morbid Saint o Protector, por dar sólo
algunos ejemplos)
¿La batuca y el bajo?
La primera no está mal, la segunda tampoco, pero “X” factor común, promedio o
cualquier adjetivización neutra que pueda moldearse a su imagen y sonido. No es
para nada destacable, pero así tiene que ser para el sonido que tratan de
presentarnos. Caso muy distinto fuera una hipertécnica en ambos falanges, y
creo yo no estar en el error de decir, si así fuese su sonido tendría que
trascender intrínsecamente; esto por los valores compositivos cargados de
empuje y tendencia a innovación, no se podrían estancar ningún instrumentos.
La producción por se
nueva está de lujo. ¿Qué se pueden esperar 2003? Aunque siempre he creído que
las producciones no son cosa de azar, en algún disco o banda se acopla y en
otros simplemente se embadurna de lodo, fiasco y deshonradas miradas de reclamo
hacía la impalpable cordura, el derroche de talento y la abnegada constancia. ¿El
Arte? No me llama la atención, ese entrelazado cromático disoluto…. Mmmm, paso.
En fin. Hay canciones
violentas, duras, con una dosis cargada de frescura y aires renovadores, aunque no
es música tan relevante para mí. Para tomarse un refresco, hablar de las
cotidianidades de la vida, tener una platica entretenida entre amigos… pero
nada más. Si lo hallan y no lo han escuchado, tienen el sello de aprobación y
no hay pierdes ni música faltante de algo. Sólo tómalo, nene
Nota: un tambaleante 7.4 y si me pongo de malas te mando a comprar donas, ¿entendido?
Publicado Por: Albert Spaggiari
me lo descargare ah ver si es tan bueno como dices ;) (y)
ResponderEliminarNo es un disco "imperdonable para todos" pero te aseguro que si te gusta el metalcore con una tendencia muy groovie y violenta es muy difícil que te decepcionen. Eso sí son más pesadones que los Bullet For My Valentine, con eso ya tenes una antesala de lo que viene.
EliminarPrimer comentario del blog :D Saludines, Eduardosequeira238
-Albert Spaggiari-