The Temptations es un
grupo musical de Soul, R&B, Doo-Wop y funk. La banda se formó con la fusión
de dos grupos de los años 50s –The Primes y The Distans-, lo más peculiar es
que la banda sigue activa (Muy similar con lo que pasa con Isley Brothers aparentemente
la banda más longeva en permanecer activa) de éstas dos bandas se unirían los músicos
más calificados para hacer una formación más seria, cerrando un ciclo de
competición entre ellos. Después de varias reformas en el Pre-Temptations, la
banda actualizo sus miembros para su primer álbum con los siguientes:
Otis William resulta
ser el único miembro oficial por más de 60 años de trayectoria (Impresionante ¿no?),
Melvin Franklin, “Al” Bryant, Eddie Kendricks Y por último Paul Williams. La
anterior sería nominada la alineación de los 5 grandes. La banda fue un pilar
para “Motown Records” –Discográfica que patrocinaba solamente a músicos negros –
seguidos por Steve Wonder en sus filas de “Cracks” qué la disquera no quería
perder. Después de varias actuaciones y algunos singles la banda saca su primer
álbum, con una discografía de más de 50 álbumes, Meet The Templations fue un bizcocho
que adelantaría la llegada del Soul y enaltecería los elementos de canto del
Doo-Wop tradicional.
Señores, la banda fue
tan influyente que hay mucha información por ahí (No nos mintamos la Wikipedia)
que los comparan con la popularidad extensa y prolija que tuvo The Beatles tant
o en el pop como el rock de aquellos años; el caso se aplica también para
nuestros negrines con géneros y estilos de canto nacidos del Blues de raza
negra, solo qué con toques mucho más melódicos enfocados al pop. Lo característico
de ésta música, es que pasan años y siguen atrayendo publico novel y con interés
de desmenuzar su música. Mucha música, aunque fueses popular, que se hacía antes
contaba con mucha entrega y es sorprendente darle una mirada al 2013 y rascarse
la cabeza y pensar en el declive que hemos topado para estas alturas gélidas.
“The Meet The
Templations” no cuenta con un gran repertorio de elementos instrumentales
excelentes, no muestra nada de guitarras potentes y viscerales, ni incursión en
música experimental ni nada de pretensión. Antes de escucharla debemos saber
que éste tipo de música se hacía dejando aún lado lo que para el blues era “sacro
santo” (Guitarras y teclados estilo Ray Charles) aunque la influencia para
Brown y los suyos se hace notar desde este punto de inflexión. Pero por otro
lado tenemos unas técnicas orquestarías en vocales increíbles; claramente notamos
la carencia de instrumentos virtuosos, pero éstos son reemplazados por la
excelsa y zigzagueante calidad vocal. Tenemos tonos graves, cómo tratando de
interpretar el bajo o el contrabajo (¿Quién sabe?), otras más condescendiente
que nos develan tonos más resonantes cómo guitarras.
Por lo anterior no
quiero decir que sea música acapella o acústica, claro que hay guitarras, pero
sintonizan levemente y suavizan la música que tocan aquí. Están perfectamente
distribuidos los labores entre tonos y escalas “rangisticas” y de colores y
profundidades, efectivamente tenemos: Los Coristas, Los fraseadores, Los elevadores
tonos, los ambientalistas. Perdonen que no les dé nombres formales, pero de
ésta manera se ubican para aquellos que aún no manejan jerga musical (Cómo yo
jajaja) Y en lo que escribí éste punto se terminó el álbum (No la reseña, a
seguir leyendo pendejos)
Para no inmiscuirnos
en lodo fangoso y repetitivas exhalaciones redundantes y pletóricas, vamos a
resumir un poco, también para no cansarlos.
Por un lado tenemos
el tópico, o la temática. En composición letristica son fragmentos básicos de literatura
romántica, bueno digámoslo un poco menos áulico: “son puras letras de amor” sí,
impregnadas de romanticismo, bellas historias fantasiosas, amores perdidos y
recuperados a la vez, el sentimiento de amor en su más extensa definición
coloquial. Bien melosas y contagiosas, “enmielandonos” a cada ratín con esas mágica
narrativa estudiantil. Sencillamente muy gustosa, pero no es de todos los
tiempos señores. Pero, bueno, en este punto creo que no habrá mucha controversia
ya que la década de los 60s las letras eran 70% de ésta índole.
Sin duda hay un buen
disfruté de tal álbum cuando le damos su debido tiempo, sí al principio nos
resultará algo “soso” y pasado de era, pero, amiguetes, ¿No estamos algo
grandecitos para esas tonterías? Pero continuando.
También lo que me
llama la atención es las vociferaciones en interludios del disquete; muy
trabajadas las ecualizaciones en las vocales, y bien logradas en distintos
momentos que se van desenvolviendo. Claro, éste caldo dura entre 30y 32
minutos, quizá podríamos pasar mucho tiempo escuchándolo sin que se nos vaya el
día y tener un gozo singular de la esencia de éste mismo. Para no aburrirse del
Lp no hay que concentrarse de una manera de “análisis o estudio” (Lamentablemente
yo me mantuve debajo de esta expectativa, por lo cual tuve que remontarme al inicio
varias veces) es más bien una óptica de “pasadon de tiempo” entiéndanme bien,
no estoy alegando que el álbum de simple que es (Po que lo es 110%) no conste
de una escucha disfrutada y bien dilatada. De tan simple que es que hay que
tomarlo así, sin muchas contemplaciones.
Como dije, lo único
indispensable es concentrase en las vocales y no perderse en lo que no hay.
Muchos tracks aquí
tienen su merito, por ejemplo: “The Way You DoThe Things You do” estremecedora
y soberbia, “Paradise” aquí especialmente se muestra la definición mas completa
de elaboraciones de Do-Woop, para mi sin duda la mejor pieza que seguiré
disfrutando por muchísimo tiempo; la danzante y bailarina “Ins´t She Pretty” que
tiene grandes y magistrales alteraciones vocales; “Your Wonderful Love” algo
así cómo Joe Cooker en el lado del soul y cadenciosos susurrados de espaldas
que la acuerpan, siendo una de las interpretaciones más dignas y dichosas bajo
el nombre “The Temptations”; “The Further You Look, The Less You See” muy
similar a la anterior, agradándome muchsimo más el lado “B” con estos agradable
sencillos; “Check Yourself” Beatlemaniaca y chasqueante y por último “Slow Down
Heart” con el timonel en “Otis” aquí, como dije anteriormente y no me cansó de
repetir, en éste hermoso lado se ve más la manifestación de William como un
excelente Frotman y de amplia potencial fónica.
Señores, casi en noviembre
y discos cómo estos le quedan al guante a la temporada.
Por último detalle,
cómo acostumbro “la portada” catedrática que nos presentan, unos zambos con sus
finos y alagados trajes de Smoking, que deslumbra de modo común este diseño con
sus canciones impregnadas en la caratula.
No hay quejas ni
reclamaciones, sí te la llevas de muy durito con tu música te reto a que le
pegas una escuchada a estilos suavecitos y lejos de ser afeminados (Bueno quizá
un tanto) a lo mejor te gusten. La música fue hecha para escucharla, no para
vestirla. Abajo está el enlace, sí lo pinchas posiblemente cuando tengás unos
70 años y pongas el disquete se te saldrán dos que tres mojarras de llantos.
Nota: 7.0
Publicado Por: Albert Spaggiari
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