Emperor – In The Nightside Eclipse [1994]

¡Una vez el rorro pirrorro me enseñó a que si no puedes buscar algo bueno, busca lo malo!

En la concurrida ola noruega, y en el blog, no podía faltar, Emperor, los piojos que nunca tocaron pinturas faciales; eso tengo, entendido por el momento. Después de la salida de Mortiis  se contrajo un bajista adicional con el nombre de “Tchort”. Liderados en un principio por: “Ihsahn” (Vocal y Guitarro), Samoth en la bataca y el, ya mencionado, “Mortiis” Desgraciadamente está formación duro un santiamén y sólo puedo fecundarse un trabajo, un Ep del 93.

In The Nightside Eclipse, llega un poco más tarde a la escena, pero su ardor vocal sería muy producente.

 Lo que nos entrega el álbum es alrededor de 50 minutos de un ruido ensordecedor y palpitante, que nos enreda en unos riffs cíclicos y estranguladores en todas las canciones; Blast infinitamente invencibles, el bajo apenas se logra dilucidar y la ornamentación sinfónica envuelve el caramelo en una olla de mierda, de pura mierda con tenias y chinches muertas.

Quizá la recopilación que nos enjutan los labios, es la gran influencia de Bathory y Mayhem, siendo muy poco frecuentada en este estilo de Black Metal extremadamente punzante y desesperante. Los tracks son a veces casi indiferenciables, la onomatopeya es casi un esfuerzo de afonía indumentaria, la esterilización del sonido es irreprochable, pero lo que hace a este trabajo diferenciarse de los demás es su visión de campo. Esto quiere decir el motivo exacto a la cual el álbum promete dar, en otras palabras la música aquí es inútil en cambios de ritmos, y lo más desconcertador es que conserva progresión sin adelantarse, aquí entra la magia sinfónica. 

Una ejemplo claro sería de la siguiente manera: Imaginémonos un chocolate de cobertura débil y fácil de saborear, pero hay un pequeño problema, este chocolate permanece oculto en una gran bola de cemento, dura e irrompible, con capas que cubren todo el diámetro de ésta bola de acero, la incógnita es que ésta consume al delicioso chocolate en una capa superficial más dura, más fuerte y difícil de roer. Ahora nos preguntamos, ¿De qué forma lijaremos esta piedra malosa de hierro? Simplemente sentémonos, con la atención más preocupada posible para hilvanar la cajita mágica impotente que cubre el oxidado y trémulo chocolatillo.

Pero no todo es tan malo, la producción, de la cuál se quejan muchos, es muy pasadera, atrapa a lo elementos musical en su circulo, los añeja y dejan que maduren y florezcan de la mejor forma, sin agredirse en una pared indestructible de sonidos potentes que estallan con la noción de alguna escucha prolija. El trabajo de añadir  una ambientación maliciosa y desesperanzadora es plausible, porque cumple con los requisitos de transportarte, no a la cuevas nórdicas, si no al mismísimo purgatorio a pagara tus cuentas pendientes, compadre –Y si te rehúsas leviatán con su ganchuda verga te violara hasta el ultimo de tus días, hasta que tu respiración se acorte, y las gotas hediondas de sangre conservadas, que circundan en el techo, se vayan deslizando hasta que  caigan en tus miembros carcomidos y engangrenados-

La música aquí es mística y dubitativa en nivel de composición, quizá parecer ser que la banda haga un sonido inentendible alrededor de los 50 minutos que lo conforman, pero la prueba máxima se ve en los pequeños arreglos que se escudriñan bajo la manga, el as y la potencia escondida del trayecto infernal. No hay gran variedad de sonidos, no hay gran variedad de despótica violencia amenazadora, pero si hay aquella incertidumbre que te transportan a un mar de pensamientos ingratos, donde pocos quieren llegar y muchos mueren al pisar.

El álbum, primeramente, no parece metal, ni siquiera música disfrutable, no tiene el más ápice de buenos modales y gestos comprometedores ¡No, no, no! Las canciones son casi similares y de monta endurecida. Quizá por que le disco sea de estilo revolucionario, porque si se fijan en todas las producciones noruegas de black metal, no antes de los 90s, ni más de los 93s, todas eran una portentosa herencia bathory y venom, no había aquella idea desesperante de matar neuronas, cómo aquí lo hizo Emperor, y para que no se lleven un gran susto, éste, puso una atmosfera espeluznante; Muchos catalogando el primer disco de Symphonic Black Metal o Atmoferic Black Metal. Y quizá si nos enfocamos más a la parte de orientación, nos vayamos por dos caminos: 1 – Escuchar un disco “Inescuchable” o permanecer ahogado en el ambiente más pútrido y ennegrecido posible, Picos, cuervos, cuevas, llantos, lamentos, odio, odio y más odio, un aire rotundamente malsano, infeccioso, que lo único que causará es graves problemas con el habla  y graves perdidas de memoria visual, auditiva y en total y peor caso, Cognitiva! Esto quiere decir, que perderás tu disco duro, ¡ESTUPIDO!

2 – Lo mas recomendable sería pasar el mal trago con una buena dosis de efedrina y dormirse lentamente con alguna droga potente, con algún calmante… ¿Qué diablos?….No, No, No  se necesita nada de esa mierda para que de inmediato nos lleven al mundo oscuro, no, no, no hablo de Yu Gi Oh, Hablo de lo más negro que hay en este mundo, hablo lugares fantasmagóricos y personas infames, que te causaran dolores molares y sabrás donde estás parado, en el peor de los mundo, HIJO DE LA GRAN PUTA, ENTRARÁS EN RAZÓN O TE APALEARÉ HASTA QUE PIERDAS LA CONCIENCIA, PORQUE SIN CONCIENCIA NO PODRÁS SUFRIR!

 Los tracks, vuelven loco a cualquier persona, los hipnóticos pasajes con la guitarra son enfermos, y la batería nunca se para, nunca calma y siempre destroza el mismo bombo, sin hacer ningún cambio considerable. Las vocales de Ihsahn son aullidos de un niño desesperado, que está atrapado en una atmosfera en un bosque que alberga gran oquedad y soledad por doquier.

¡Amigos, si creían que Dark Funeral era la bestia en el Black Metal, atrévanse a pinchar a estos sujetos, atrévanse a solo analizar este disco!

Un álbum importantísimo que llevó el Black Metal a otros niveles de demencia, que influyó en el vergazo de bandas Symphonic y algunas mamadas de combinación, que estaban saliendo. Disco que es marcado por los esquizofrénicos y que es locura atrapada en 50 minutos delirantes de laberintos de una pesadilla que nunca termina. 

Una vez que lo pinches tu cerebro se hará chico, tu brazos serán más delgados y tus piernas se desplomaran; Imagínate manco e invalido, atrapado en montaña ignorada por la sociedad, en la cuál solo permanecen figuras extrañas, fuera de este universo, que se alojan en ecos algunas voces espantosas, de vestidos blancos largos, de pisadas volcánicas.. y solo escuchas los alaridos, y para salir de ese mar de bestias ignotas, tendrás que arrástrate toda la puta eternidad, esto es lo que te pasará si escuchas el álbum! 

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Nota: 8.0 

Publicado Por: Albert Spaggiari